El sábado 18 de julio se realizó vía Zoom el Encuentro de fábricas y empresas recuperadas y cooperativas de trabajo en defensa de las gestiones obreras, convocado por Cerámica Neuquén y la gráfica Madygraf de zona norte de la provincia de Buenos Aires, bajo el lema: “¡Si tocan a una, nos tocan a todas! No al desalojo de Cerámica Neuquén”. Participaron 16 fábricas recuperadas de distintas localizaciones del país que pertenecen a distintos rubros y poseen diversos marcos temporales de origen. Además de las recuperadas convocantes, fueron parte la ceramista Zanón de Neuquén, la textil Bruckman, la Cooperativa Química Del Sur y la imprenta El Zócalo de CABA, que llevan ya dos décadas de control obrero de la producción. También participaron las cooperativas gráficas Chilavert de CABA y WorldColor de Pilar, el diario Tiempo Argentino de CABA, la fábrica autopartista Emplastcoop de Tortuguitas, la papelera Ansabo de Quilmes, la metalúrgica Gotan de Burzaco, la fábrica alimenticia La Terre de Mendoza, la ceramista Stefani y las textiles Neuquén y Traful Newen de Neuquén. Saludó al encuentro la recuperada Hotel Bauen.

Asimismo, compartieron la asamblea abogadas y abogados de las gestiones obreras, como Mariano Pedrero, Myriam Bregman e Ingrid Hirsh; y trabajadoras y trabajadores militantes de organizaciones sindicales, políticas, sociales y artísticas tales como trabajadores metalúrgicos, ferroviarios de la línea Sarmiento, de la maderera neuquina MAM, Mondelez Pacheco, la agrupación de trabajadoras domésticas y de casas particulares, el sindicato ceramista de Neuquén, el SIMAPRE, el MTD, el FOL, el Ancla, la corriente social y política Marabunta, organización La Base, referentes del  Plenario del sindicalismo combativo, el Movimiento de agrupaciones clasistas, Música por Zanón y Encuentro Nacional de artistas y trabajadores de la Cultura, la agrupación estudiantil En clave Roja de la Universidad de Comahue, el POR y los partidos del Frente de Izquierda Unidad PTS, PO, IS y MST.

El encuentro fue muy emotivo porque, además de la solidaridad colectiva expresada hacia la situación actual de Cerámica Neuquén, se recordaron luchas conjuntas emprendidas años anteriores tales como las de las fábricas Bruckman y Zanón.

Las empresas recuperadas en el contexto de la pandemia por COVID

En una asamblea con intervención de más de 40 oradores se efectuó este encuentro de empresas recuperadas en el marco de la crisis social y económica que se profundiza en el contexto de la pandemia por COVID. Los efectos de la misma son un aumento de las suspensiones, las rebajas salariales y los despidos, frente a los cuales la recuperación de las empresas bajo gestión obrera se presenta como una alternativa con tanta vigencia como en sus orígenes, en el contexto de la crisis neoliberal que se expresó en 2001 en Argentina.

El encuentro fue abierto por la ceramista convocante, Cerámica Neuquén, cuyos trabajadores resumieron la crítica situación particular que se encuentran atravesando actualmente a causa del remate dictado por el poder judicial provincial. Esta fábrica lleva 6 años de funcionamiento bajo gestión obrera, luego de un conflicto de más de 100 días por la recuperación de las fuentes y el lugar de trabajo tras los despidos y el abandono patronal en el año 2014. Desde ese momento la causa judicial se extendió hasta el presente, no se abonaron las indemnizaciones, no se dio lugar al pedido de expropiación por parte de los trabajadores y se dictaminó el remate del inmueble habilitando la intervención de la fuerza policial. Por ello, la lucha contra el remate de esta ceramista y por la expropiación de la fábrica fue la consigna concreta que aglutinó la convocatoria al encuentro, y durante el mismo se expresaron otros problemas propios de la generalidad de las empresas recuperadas. Asimismo, se presentaron propuestas para combatirlos desde la lucha conjunta y en solidaridad con otras organizaciones.

Ahogo estatal y asfixia del mercado

Trabajadores de distintas fábricas recuperadas presentes en el encuentro coincidieron en señalar una serie de dificultades comunes que deben enfrentar cotidianamente.  La lucha por los puestos de trabajo no culmina con el reanudamiento de la producción bajo gestión obrera tras la quiebra o abandono empresarial, sino que persiste día a día, en los que se trabaja bajo la incertidumbre sobre las posibilidades de comercialización, los bajos y fluctuantes ingresos y la amenaza a la continuidad misma de la empresa recuperada. Estas dificultades, de acuerdo a lo expresado por lxs trabajadorxs, residen en dos motivos centrales.

Por un lado, la asfixia del mercado, que consiste en que las empresas recuperadas se ven obligadas a competir con las grandes empresas, lo que se traduce en dificultades de comercialización y de renovación tecnológica.

Por otra parte, y en íntima relación con lo anterior, el ahogo al que Estado conduce a las recuperaciones, que se comete por vía de la desidia y por vía de la represión. La desidia se expresa en la inexistencia, escasez o restricciones para acceder a créditos, subsidios y políticas públicas que permitan a las gestiones obreras alcanzar ingresos acordes al salario mínimo, vital y móvil, y también acceder a inversiones para maquinarias y medios de producción necesarios para comercializar. Cabe destacar al respecto que los trabajadores de empresas recuperadas deben inscribirse como monotributistas sociales, pagar de sus propios bolsillos obra social, aseguradora de riesgos de trabajo y aportes jubilatorios, tras lo cual solo obtendrán una jubilación mínima. Muchos de los oradores contrastaron los escasos o nulos beneficios para las gestiones obreras con los millonarios subsidios y rescates a los grandes empresarios, quienes tanto en el contexto de la pandemia como durante años anteriores contaron con importantes aportes desde el Estado como los ATP y el programa REPRO, en los cuales no están contempladas las cooperativas de trabajo.

En segundo lugar, el Estado actúa boicoteando y reprimiendo las gestiones obreras mediante los remates de los lugares de trabajo dictados por el poder judicial, los intentos de desalojo emprendidos por las fuerzas policiales, como sucedió en Zanón, Bruckman y el hotel Bauen, y la desatención desde las legislaturas provinciales, donde las fuerzas políticas mayoritarias suelen impedir el tratamiento de los pedidos de expropiación de los trabajadores, como es el caso de Cerámica Neuquén. Aquí nuevamente se observa el accionar clasista del Estado, por el cual los poderes judicial y legislativo resuelven rápidamente medidas a favor de los empresarios que vaciaron y despidieron a lxs trabajadores mientras que dilatan las resoluciones que atañen a los intereses obreros, como por ejemplo las expropiaciones.[1]

A su vez, otra dificultad derivada de la acción conjunta entre empresas privadas y Estado son las deudas por los tarifazos en los servicios de luz y gas, que las recuperadas no están en condiciones de abonar y para los cuales no cuentan con tarifa social.

La continuidad y reconversión de la producción como estrategias ante la pandemia

Varias de las fábricas recuperadas expusieron las medidas concretas que adoptaron por propia iniciativa para enfrentar las nuevas dificultades para producir y comercializar que se les presentaron en el contexto de la pandemia.

Las tres ceramistas de Neuquén se unieron desde el mes de marzo para reclamar los permisos estatales para poder continuar produciendo, ya que sin producción no hay comercialización y, por ende, no hay ingresos para las familias obreras. Lograron este permiso, pero no consiguieron aun superar las restricciones a la producción que este contexto impone, por lo cual solo funciona un turno de los tres que se llevaban a cabo previamente. Esto significa que los ingresos son muy inferiores a los que percibían, lo cual plantea la necesidad de un salario de cuarentena para los trabajadores de las empresas recuperadas.

Otra estrategia compartida por varias de las gestiones obreras es la reconversión de la producción orientada a recursos sanitarios necesarios para la salud pública en la atención de la pandemia, por la cual fábricas como Madygraf, Gotan y Ansabo ahora producen sanitizantes y la textil Neuquén confecciona indumentaria para trabajadores de la salud y barbijos. Esta reconversión se destaca por la finalidad solidaria de los obreros, mediante la cual donaron parte de la producción a hospitales públicos cercanos a las fábricas.

La salida de las y los trabajadores

Desde las distintas fábricas los colectivos obreros elaboraron una serie de propuestas para enfrentar la crisis actual y lograr que las empresas recuperadas y sus trabajadores puedan continuar con la producción. Las mismas se expresaron en las siguientes consignas:

  • No al remate en Cerámica Neuquén.
  • Cupo para las recuperadas en las licitaciones.
  • Créditos blandos y subsidios para la renovación de maquinaria. Renovación tecnológica a cargo del Estado.
  • Condonación de todas las deudas a las empresas de energía.
  • Tarifa social acorde a las posibilidades reales de las cooperativas.
  • Salario de cuarentena de $30.000 pesos para cada trabajador que no pueda trabajar.

Otro de los puntos en común fue la necesidad de unidad y acción común, como frente único, tanto entre fábricas recuperadas como también con otros trabajadores tanto ocupados como desocupados y organizaciones en lucha.

Al finalizar el encuentro se votó una declaración conjunta y se acordó la difusión y pedido de apoyo a todos los sectores, mediante una juntada de firmas y adhesiones. A su vez, se anunció que se realizará en los próximos días una jornada de lucha nacional y movilización a la casa de Neuquén en la Ciudad de Buenos Aires.

A continuación, reproducimos la declaración votada:

Declaración votada en el encuentro de empresas bajo gestión obrera

“Las fábricas recuperadas que surgieron en el 2001 se volvieron a reunir “

¡Si tocan a una, nos tocan a todas!

NO al remate de Cerámica Neuquén.

El sábado 18 nos reunimos trabajadores y trabajadoras de distintas fábricas bajo gestión de los trabajadores. De Cerámica Neuquén Zanón, Stefani, Madygraf, Ansabo, Gotan, Brukman, La Terre, Textiles de Neuquén, WorldColor, Emplastcoop, Cooperativa Química Del Sur, Chilavert, Textil Traful Newen, cooperativa de “Tiempo Argentino” junto a los dirigentes del Sindicato Ceramista de Neuquén Alejandro López y Andrés Blanco y nuestros y nuestras abogadas, Mariano Pedrero, Myriam Bregman e Ingrid Hirsch.

Estuvieron presentes compañeros y compañeras del FOL, MTD, Marabunta, del PSC, de Ancla, MST el MAC PTS, de Izquierda Socialista, del Partido Obrero, el POR, Ferroviarios del Sarmiento, de Mam, Kraft, organización La Base.

Nos reunimos de urgencia frente a la amenaza de remate y desalojo de nuestros compañeros de Cerámica Neuquén. Volvemos a retomar como en aquellos años donde empezamos a ocupar las empresas que si “nos tocan a uno, nos tocan a todos” y por eso hoy juntos decimos En Cerámica Neuquén “No pasarán”.

Hoy una nueva crisis amenaza a los y las trabajadoras de las “fábricas recuperadas”, de las manos de los patrones vaciadores y los gobiernos que no dan respuestas.

La resistencia primero, la ocupación y la puesta en producción en manos trabajadoras fue una respuesta en defensa propia ante los cierres de empresas masivos en todo el país desde el 2001.

Desde aquellos años se fueron sumando numerosas empresas y fábricas que mantenemos bajo gestión obrera, de distinta manera, frente al abandono de los empresarios y los gobiernos.

No nos resignamos cuando quisieron dejarnos en la calle. Ocupamos las fábricas y las pusimos a producir. Es un orgullo para nosotros y nosotras poder producir sin patrón, pese a todas las dificultades y trabas que nos ponen.

Hoy la crisis nos amenaza con mucha más fuerza. Se vienen nuevamente despidos masivos, que dejarán millones de trabajadores y trabajadoras en la calle.

En este marco, nuestras Gestiones Obreras siguen recibiendo ataques y amenazas. Lo más grave HOY es el intento de desalojo de Cerámica Neuquén. Un Juez mediante la fuerza pública pretende un desalojo violento para luego rematar la fábrica.

Por eso, lo primero que decimos nuevamente es “No Pasarán”.

Y decimos unánimemente: RESISTIR.

Para eso ya hicimos reuniones solidarias, concentraciones y caravanas en Neuquén. Pero sabemos que no alcanza.

Sabemos que nuestra lucha es nacional. Como lo fue Zanón, el BAUEN, MadyGraf y tantas fábricas hermanadas en esta lucha.

Nos tocan a uno y nos tocan a todos, fue nuestra consigna allá a principios de este siglo. Hoy volvemos a levantar esa bandera y llamamos a poner el cuerpo si es necesario para que el desalojo no pase en Cerámica Neuquén.

La situación para todes es difícil.

Para las nuevas como Gotán y Ansabo, tampoco existe el apoyo necesario. Las patronales se fueron, el estado paga ATP incluso a los gerentes y ceos de empresas como Techint, pero estas nuevas cooperativas tienen que sobrevivir solas. El Bauen vive hace años con una orden de desalojo pendiendo sobre sus espaldas. Y así podemos seguir.

Por eso nos unimos trabajadores y trabajadoras de todas las fábricas recuperadas, que son una conquista de todo el pueblo argentino, para exigir una salida para nuestras gestiones obreras.

Tenemos por detrás una historia de lucha. Por delante, la voluntad más firme de no dar un paso atrás.

Queremos que las gestiones obreras sean un ejemplo a seguir. Que las empresas donde haya cierre o despidos masivos sean ocupadas y puestas a producir por sus trabajadores. Que pongamos nuestro trabajo al servicio de la comunidad, trabajando en unidad con nuestros hermanos y hermanas desocupadas peleando por trabajo genuino.

Buscamos la unidad de trabajadores, de las fábricas bajo gestión obrera y la unidad con toda la clase trabajadora para pelear unidos para que esta crisis no la paguemos nosotros sino los grandes empresarios.

Llamamos a todas “las recuperadas” a ponernos en pie, todas juntas. Convocamos a todos los sindicatos, a los artistas que siempre nos apoyan, a los estudiantes, a los diputados y diputadas solidarios con las luchas del pueblo a que sean parte de esta pelea y esta campaña en defensa de “las fábricas sin patrón”.

Sabemos y respetamos las propuestas de cada fábrica o empresa recuperada. Entendemos que cada una, va buscando su propia salida.

Muchos luchamos por la expropiación y estatización bajo gestión obrera y decimos todos juntos y juntas:

  • No al remate en Cerámica Neuquén
  • Cupo para las recuperadas en las licitaciones
  • Créditos blandos y subsidios para la renovación de maquinaria. Renovación tecnológica a cargo del Estado.
  • Condonación de todas las deudas a las empresas de energía.
  • Tarifa social acorde a las posibilidades reales de las cooperativas.
  • Salario de cuarentena de 30 .000 pesos para cada trabajador que no pueda trabajar.

TOCAN A UNA TOCAN A TODAS

En el Encuentro resolvemos:

  1. Conformar una Mesa de empresas bajo gestión obrera independiente de todos los gobiernos para coordinar nuestra defensa común, llamando a que se integren todas las cooperativas para luchar sabiendo que todo lo que consigamos lo haremos con la lucha y que ningún gobierno va a solucionar nuestros problemas y le exigimos a las centrales y sindicatos que apoyen nuestra lucha.
  2. Al mismo tiempo llamamos a una jornada nacional de lucha donde cada fábrica planifique acciones para hacer visible nuestra situación y pelear por nuestros reclamos. Impulsaremos también un acto en la Casa de Neuquén de Buenos Aires.
  3. Impulsar una gran campaña nacional e internacional de pronunciamientos de en apoyo a las gestiones obreras.
  4. Organizar un nuevo encuentro para seguir unidos y coordinando la lucha.
Citas

[1] Para 2010, el 63% de las ERT relevadas por el Programa Facultad Abierta UBA habían obtenido la expropiación, de las cuales el 19% correspondía a leyes de expropiación “definitivas” y el resto a temporarias. Para 2013, solo el 16% de las nuevas empresas recuperadas constituidas entre 2010 y 2013 logró la sanción de una ley de expropiación a su favor (Ruggeri et al., 2014 p. 23). Durante el gobierno de Macri se endurecieron los impedimentos estatales para lograr las expropiaciones, e incluso se vetaron expropiaciones ya obtenidas, como el caso del Hotel Bauen (Ruggeri et. Al. 2018, p. 15).